EL ORIGEN DE LA LAGUNA DE COLTA
Las aguas de la laguna de Colta guardan secretos. Están escondidas, “durmiendo” tranquilas, entre los centenares de totoras, plantas existentes gracias a las condiciones climáticas apropiadas y situación del terreno. Su enigmática belleza encierra varias dudas. Como parte de la herencia oral Puruhá se crearon varias leyendas tras el origen de la mítica laguna. Marcia Pagalo, en un trabajo para la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, hizo una recopilación de estas historias.
Hace mucho tiempo, los moradores de la parroquia Santiago de Quito hicieron una gran fiesta, a la cual invitaron a mucha gente. Ofrecer abundante comida y bebida era la meta a cumplir por los priostes, quienes querían brindar lo mejor a sus visitas. Ocuparon varias ollas para preparar los alimentos, pero faltaba algo en especial, ¿Donde prepararían la fritada? Tomaron la decisión de mandar a un grupo de personas para alquilar una paila en Balbanera. En cuanto llegaron la vieron. Brillante y regordeta ¡era perfecta esta paila! Estaba labrada en bronce, muy grande y pesada, por ello tenía cuatro orejas para ser levantada entre varios. Caminaron una larga distancia de regreso a su parroquia, con la paila a cuestas; en ello, decidieron descansar. Dejaron la paila en el suelo y se sentaron en el suave pasto. Una vez que se sintieron más animados, tomaron la paila entre todos, y al intentar levantarla esta no se movió.Un intento tras otro, pero ésta parecía resistirse, cuando en ello se dieron por vencido y la dejaron en este sitio. Al día siguiente, acompañados de más compañeros regresaron en busca de la paila; grande fue su sorpresa al encontrarla llena de agua. A pesar de tantos intentos no pudieron levantarla. En ello se percataron que el agua comenzó a desbordarse, hasta formar la laguna.
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