Un día, cuando era estudiante del Colegio Daniel Reyes, en San Antonio de Ibarra, había realizado un dibujo en cartulina y lo primero que hice fue mostrárselo a mi padre, que era carpintero. Él, conmovido, me dijo: “Qué bien, lindo mijo, lindo. Presta para darte enmarcando ”. Alegre ante esta respuesta le dije: “Claro papá, para eso mismo venía a verle”. Entonces dijo: “Pero primero ve a indicarle a tu mamá, Teresita, lo que has hecho”. Sin perder tiempo, apurado, me dirigí a la cocina, donde mi mamá estaba preparando los alimentos (papas con cuero). Con mucha efusión le dije: “Mamita, ¿qué le parece este cuadro ?, mi papi lo va a enmarcar”. Ella me contestó: “Lindo está, bonito está, mijo”. Luego me dio unos golpecitos en la espalda. "Pero lo único que no me gusta es la firma, está fea", agregó.
Yo había empezado a firmar mis cuadros como W. Gualsaquí, entonces le dije: “Pero, mami, Gualsaquí es el apellido de mi padre”. Ella me respondió: “Y el mío es Sasi”.
Regresé nuevamente donde mi papá y él me preguntó cómo me había ido con mi mamá. Le conté que le parecía que mi firma era fea. “Uy, mejor voy a enmarcarte el cuadro”, me dijo.
Un día, cuando estaba en el colegio de Artes de la Universidad Central del Ecuador, en Quito, le comenté al profesor Nilo Yépez lo que me había sucedido en casa, sobre la bonita pelea que habían tenido mis padres: “Mi papá quiere que firme Gualsaquí y mi madre, Sasi ”. ¿Qué hago ?, le pregunté. El maestro me respondió: “No te hagas problema, mijito. Ni uno ni otro, firma como Whitman ”. Desde entonces, mis cuadros van firmados de esta manera.
Hace algunos años atrás, el licenciado Ramiro Velasco, profesor de tantas generaciones de estudiantes otavaleños y no otavaleños, me dijo que mi nombre “Whitman” ya estaba bien posicionado y que en ese momento podía empezar con mi apellido “Gualsaquí”; que podíamos realizar una exposición con mi apellido. Mi respuesta fue un concluyente no y en ese momento recordé con cariño, ahora que no tengo a mis padres junto a mí, la pelea amorosa que una vez se dio en casa por cómo debía firmar mis cuadros.