En un lugar llamado Piedra Blanca vivían algunas personas que aseguran que el cerro era encantado, ellos son: Cristóbal, julio y Mariana, cuentan que en esa piedra observaban unos animales encantadores como nunca ellos habían podido encontrar: lobos, leones, conejos, osos, tigres y ardillas. Dicen además que sucedía lo inesperado ya que cuando se acercaban a disparar muy cerca de ellos y ante su mirada atónita desaparecían como arte de magia.
De igual forma veían hermosas gallinas con infinidad de pollitos relucientes como el oro, se emocionaban mucho al verlos y decidían atraparlos pero siempre se topaban con la triste realidad de no lograr nada y es más, al volver a un estado normal se daban cuenta de encontrarse en otro lugar diferente al que ellos se encontraban al comienzo.
Más o menos en los años setenta aún manifiestan muchos moradores del lugar, haber visto asomarse una cruz de oro; también este cerro jugó una apuesta con el cerro de Chanquil en la que perdió, entonces esa gran barra de oro fue a dar en Chanquil, desapareciendo todo su encanto y riqueza en el cerro.
Leyendas y tradiciones de Guaranda, Historia y Cultura I. Concejo Municipal de Guaranda,1998