Por: Virginia Narváez Rodríguez
Lo negativo
La pandemia ha revelado que el mundo estaba en crisis.
No estábamos preparados en ningún sentido para enfrentar una catástrofe como el Covid-19
Ni siquiera esta Pandemia ha impedido que los líderes políticos del mundo aprovechen para su beneficio.
Ningún recurso humano, económico han podido contra un microorganismo invisible como el que produce el Covid-19.
La miseria humana es incalculable, llegan a robar los recursos que la gente vulnerable necesita para enfrentar esta enfermedad.
Las redes sociales han sido protagonistas de la desinformación y recomendaciones médicas sin sustento.
Nunca imaginó nuestra generación no poder mirar o despedirse de un familiar querido que muere en un hospital. Lo único -y con suerte- recibir sus restos mortales en una caja.
A pesar que creíamos que la medicina había tenido avances importantes, resultó no ser una realidad. Un virus fue capaz de poner en jaque a toda la humanidad.
La irresponsabilidad, la inconsciencia y la ignorancia permanece sin cambio en los seres humanos.
Han pasado 100 años desde la llamada gripe española, y los pacientes vulnerables siguen sufriendo las misma consecuencias.
Lo positivo
Paradójicamente la pandemia hizo que las familias pasen más tiempo unidas.
La pandemia ha desarrollado de manera importante los medios audiovisuales como herramienta de comunicación entre familiares.
Se ha demostrado que el trabajo en casa puede ser efectivo y más barato para las empresas.
Después de muchos años y a propósito de la pandemia nos hemos dado cuenta que lo importante es cuidar a nuestros mayores.
Se ha podido mirar en algunos países, la generosidad de algunas empresas, que antes pensábamos no tenían esa sensibilidad
Aunque de manera obligatoria, finalmente se logró disminuir la agresión humana contra la naturaleza
Por la pandemia, los niños lograron que sus padres les dieran el tiempo necesario
La pandemia nos enseñó el valor que tienen los trabajadores y el equipo de salud.
Aprendimos lo importante que es mantenerse sano, con la salud no se juega
La pandemia nos hizo valorar las cosas simples de la vida.